domingo, 4 de enero de 2015

El dragón azul, glaucus atlanticus

Os voy a presentar a una criatura de las cuales se encuentran entre mis favoritas, el glaucus atlanticus.
 
Se trata de un molusco gasterópodo, que habita sobre la superficie del mar (pelágico), en aguas templadas y tropicales como la costa sur de Sudáfrica o la costa este de Australia, además de aguas europeas. Tienen un tamaño pequeño, que ronda entre 4 y 9 cm aunque se han encontrado ejemplares de hasta 40 cm. En su parte dorsal presenta una coloración azul plateada, ventralmente un azul pálido que le ayuda a no ser visto por los depredadores en su hábitat. Posee rayas azules oscuras  o negras a lo largo del pie. Tiene un cuerpo troncocónico aplanado con seis apéndices que se ramifican en ceratas. Esta especie flota boca abajo sobre la tensión superficial del océano gracias a una burbuja de aire que acumula en su cuerpo. Su desplazamiento produce una controversia, aunque es probable que se deje llevar por los vientos y las corrientes. Gracias a su rádula dentada en forma de espada consigue alimentarse de otros organismos pelágicos de mayor tamaño, como la altamente venenosa carabela portuguesa (Physalia physalis), Velella velella, Porpita porpita y Janthina janthina. En algunos casos los glaucus pueden volverse caníbales cuando se presta la oportunidad. Tiene varios métodos de defensa, una de ellas es dotarse de un sabor repugnante, y dar a su cuerpo un color muy brillante. Otra es usando un veneno, que almacena en las ceratas, extraído de su alimentación, el cual es más potente que el de sus presas. Posee unos rhinoforos como sentido para localizar los olores o productos químicos del agua, a fin de llegar a los posibles alimentos. Al igual que sus congéneres es hermafrodita y ovíparo.
También existe otra especie de menor tamaño llamada glaucus marginatus.

No hay comentarios:

Publicar un comentario